Seis meses señores, seis meses nos ha costado que Dasha Kapustina suelte prenda sobre lo bueno que es y lo mucho que la quiere Fernando Alonso, que empezábamos a pensar que el piloto les exigía a sus churris un contrato de silencio perpetuo si querían montar en su coche hasta el altar. Pero esa temporada de sequía ha llegado a su fin porque por fin tenemos información de primera mano sobre este peculiar noviazgo. No hace falta que os sentéis porque tampoco es nada del otro mundo, así os lo digo…
Mi novio, Fernando, es especial para mí porque es una persona muy normal, sencilla. Cuando nos conocimos, yo no sabía quién era. España es un país distinto al resto, tiene paisajes espectaculares, una comida sabrosísima, gente muy amigable y, además, el tiempo es fantástico. Me encanta cómo se vive aquí el verano, sus playas… Asturias es un lugar maravilloso, silencioso, apacible, un buen sitio para vivir
No me digáis… si es que Dasha es más salá que las pesetas, que empezó probando el pan con jamón y a día de hoy ya se puede arrancar por bulerías ella sola que lo hace estupendamente y sin problema. El amor que lo puede todo (el amor y que se pasa todo el rato en España tocándose el higo, con lo que disponiendo de tanto tiempo libre, a ver quien se resiste empaparse de la cultura española…)
Todo esto se lo ha contado a los de Vanity Fair, que parece que se llevan mejor con ella que nosotros. Y no solo ha hablado de su novio, sino que también nos hemos enterado que su dedicación al mundo de la moda le ha venido un poco por rebote, ya que nunca pensó seriamente el ser modelo:
No pensaba en ser modelo profesional, quería ser actriz. Pero, mientras estudiaba, comencé a hacer encargos ocasionales y, poco a poco y sin buscarlo, me vi inmersa en el mundo de la moda
Y ahí la tenéis, desfilando para Gucci o Chanel como quien no quiere la cosa…
Vía | Vanitatis
Foto | Dasha Kapustina en Facebook
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